El Barranco de Vacas, un espectacular cañón de toba volcánica en Gran Canaria
El Coleccionista de Instantes
Cuando alguien decidió llamar a la isla de Gran Canaria “continente en miniatura” no pudo estar más acertado. La variedad de paisajes y los grandes cambios que van desde los Pinos de Gáldar hasta las Dunas de Maspalomas la convierten en una isla de contrastes que siempre sorprende al visitante.
El Barranco de Vacas es uno de esos lugares sorprendentes. Situado entre las localidades de Agüimes y Temisas, en el sureste de la isla, este barranco y sus tobas de colores, o formaciones rocosas esculpidas por el agua, recuerdan a los paisajes que estamos acostumbrados a ver en el Cañón del Antílope en Arizona, Estados Unidos.
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Un paisaje volcánico oculto a la vista en Agüimes
A pesar de su innegable belleza, el paisaje del Barranco de las Vacas, ubicado a las afueras del municipio de Agüimes, pasó desapercibido durante mucho tiempo. Fue la aparición de las redes sociales y la difusión de miles de preciosas fotografías de esta obra de arte de la naturaleza las que han sacado a la palestra el tesoro geológico.
Este cañón de tonos rojizos está formado por tobas volcánicas, rocas que surgen por acumulación de ceniza volcánica y que poco a poco fueron erosionándose gracias a la fuerza del agua y el viento. Y no es muy largo. Tiene apenas 50 metros de longitud, pero son 50 metros de puro espectáculo: al atardecer las serpenteantes paredes de roca dan forma a un juego de luces y sombras con el sol que intenta penetrar en los acantilados.
Cualquier momento del año es bueno para visitar esta obra de arte de la naturaleza, pero te recomendamos evitar las horas de más calor en verano, y las lluvias intensas porque el agua puede correr por el barranco y el paseo resultará algo peligroso. Un lugar mágico que ver en Gran Canaria.
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Cómo llegar a las Tobas del Barranco de Las Vacas
Para llegar al Barranco de las Vacas en vehículo propio hay que tomar la GC-550 y llegar hasta el kilómetro 14 de la carretera, pero no debes buscarlo en el mapa. Los especialistas apuntan que este precioso cañón no forma parte del conocido Barranco de las Vacas, que empieza en realidad mucho más abajo, sino que forma parte del Barranco de Barafonso. Y esto puede generarte mucha confusión a la hora de visitarlo.
Revisa bien las coordenadas y busca en los mapas “Tobas de Colores del Barranco de las Vacas”. Sólo así llegarás al punto exacto en el que se encuentra la entrada para disfrutar de esta formación geológica.
No hay mucho lugar para aparcar en la zona, por lo que depende del lugar que encuentres, la distancia hasta el inicio de la ruta cambiará. Para acceder al lugar tienes que saltar el quitamiedos de la carretera y bajar justo debajo de un puente de piedra en una curva de la carretera hasta el túnel que verás justo debajo. Desde allí hasta el cañón apenas hay 4 minutos caminando y el camino no entraña demasiada dificultad.
Te recomendamos acercarte a la zona en coche, pero si decides optar por el transporte público, tendrás que coger la línea 34 de bus o guagua y bajarte en el Cruce de los Corralillos para llegar al sendero. Desde allí, será necesario caminar unos 4 km por la carretera -que carece de arcén o paseos- hasta llegar a la entrada del Barranco de las Vacas.
Si te alojas en las zonas turísticas de Gran Canaria, deberás tomar al menos dos guaguas para llegar hasta aquí, ya que esta línea no pasa por las zonas turísticas.
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